Los Rompecabezas

Los Rompecabezas

 

A veces los padres de familia nos vemos abrumados por la cantidad de opciones de entretenimiento para niños que se ofrecen en las tiendas. Y ni qué decir en ciertas temporadas especiales como Navidad, o cerca del cumpleaños de nuestro peque.

Lo más fácil entonces es elegir como obsequio un juguete de moda, un videojuego o una prenda con la figura de un superhéroe impresa en ella. Pero también es bueno buscar aquellos juguetes que además de atractivos sean verdaderamente útiles para el desarrollo integral de tu hijo, como es el caso del rompecabezas.

Al verse poco complejos o atractivos, la primera idea que atemoriza a los papás es que no les gusten al niño. Pero existe para eso una gran variedad en tamaños, formas, dibujos y materiales. Incluso hay aquellos que se combinan con otros entretenimientos, como los cuentos-rompecabezas, los múltiples tipo cubos o aquellos que luego pueden servir como cuadros para decorar la habitación infantil.

Pero sobretodo, los rompecabezas son buenos porque son útiles. ¿De qué manera? Pues muy simple:

El niño desarrolla su capacidad de aprender, entender y organizar las formas espaciales.

Práctica la observación, descripción y comparación; elementos necesarios para encontrar diferentes aspectos de cada pieza (color, forma, bordes, cortes, tamaño, etc.), asi como detalles similares a otras y así poder reconstruir poco a poco el todo.

Desarrolla la capacidad de resolver problemas.

Ejercita su memoria visual.

Trabaja en el análisis para elaborar la estrategia de armado, como puede ser:
- Buscar las piezas a partir de formas, colores, u otros indicios y luego probar si encajan unas piezas con otras.
- Comenzar con los bordes (si estuvieran realzados) en las piezas que conforman los límites.

Un rompecabezas representa un desafío que si se supera genera gran satisfacción en el niño y eleva su autoestima.

Mantiene la atención y concentración del niño.

Permite mantener la curiosidad por componer lo que no se conoce.

Trabaja la tolerancia del niño y su capacidad de espera ante la dificultad.

Su armado le permite la exploración y manipulación de piezas, ayudando al mismo tiempo a desarrollar la motricidad fina, pudiendo ser más hábiles en el uso de los músculos de sus pequeños dedos que utilizan para recoger y armar pequeñas piezas.

El niño puede aprender sobre diversos temas como naturaleza, sociedad, matemáticas, español, etc.

Fortalece sus lazos familiares. Armar rompecabezas con tu hijo es una forma de acercarte y convivir con él.

Para los adultos resulta una actividad capaz de controlar el stress diario

Por todo esto, no te sorprendas cuando, contra todo lo que puedas haber supuesto, tu hijo prefiera pasarse el día armando rompecabezas de madera... ¡antes que manejar su auto nuevo a control remoto!